Esta pareja lleva desde 2006 teniendo y mostrándonos la más envidiable de las relaciones y por supuesto nosotros necesitábamos conocer cómo ha sido su historia de amor. Léela, ya nos darás las gracias cuando termines.
¡Bienvenida al mundo, Nicole!
El 20 de junio de 1967 las vidas de Janelle Ann y Anthony Kidman cambiaron para siempre. Por aquel entonces, los dos jóvenes estaban en Hawái por motivos académicos y tuvieron una preciosa niña a la que llamaron Nicole. Nicole Kidman.
De hecho, como nació en Hawái, la pequeña Kidman también recibió un nombre hawaiano: "Hōkūlani", que significa “estrella celestial”. Curiosamente, la inspiración fue un bebé de elefante del zoo de Honolulu que recibió ese mismo nombre.
Empezó desde abajo
Su infancia en Estados Unidos no fue nada fácil. Sus padres eran estudiantes en aquella época, su padre estaba trabajando para sacarse una tesis doctoral en psicología y la familia vivía con muy poco. Recuerda que dormía en el mismo colchón que sus padres, colchón que les donó el ejército de salvación.
Sin embargo, un tiempo más tarde su padre se convirtió en terapeuta conductual cualificado y la familia ganó cierta estabilidad financiera. Aun así, recuerda que su padre era increíblemente generoso y ofrecía sus servicios de forma gratuita a aquellos que no pudieran permitírselo. Él y su madre, que era enfermera, son la razón por la cual es capaz de valorar todo lo que tiene hoy.
El gusanillo de la actuación
La pequeña Nicole, que ahora es una superestrella a escala internacional, era una niña bastante tímida e incluso tenía un leve tartamudeo que poco a poco ha ido dejando atrás. De hecho, afirma que a día de hoy tampoco le gusta ir sola a eventos o lugares muy concurridos.
Cuando regresaron a Australia, sus padres la apuntaron en clases de baile, esto fue lo que despertó su interés por las artes escénicas. No tardó en participar en las obras de teatro del colegio y siguió haciéndolo durante su etapa en el instituto, donde conoció a su mejor amiga, la actriz Naomi Watts. La actuación ayudó a que saliera del caparazón introvertido en el que había vivido hasta entonces y su talento no tardó en ser reconocido por los demás.
Orígenes humildes
El interés de la joven Nicole Kidman se extendió más allá de las obras de su colegio. Asistió al Australian Theater for Young People (ATYP), del que han salido muchos otros destacados actores australianos como Toni Colette y Rebel Wilson. Aquí es donde obtuvo la motivación que necesitaba para dedicarse a la actuación por completo.
A los 16 años, Kidman consiguió su primer papel en el cine en la película navideña australiana "Bush Christmas" (1983). A finales de ese mismo año, ya tenía un papel secundario en la serie de televisión "Parada de postas". A excepción de la breve pausa que se tomó para apoyar a su madre en su recuperación de un cáncer de mama, la carrera de Kidman siguió disparándose durante esa década.
Abriéndose paso
Después de haber conseguido algunos papeles en el cine y la televisión australiana, en 1989 Kidman consiguió su primer papel en una película internacional, en el thriller “Calma total”. Su interpretación fue muy elogiada y le abrió el camino a multitud de papeles, tanto nacionales como internacionales. Uno de los títulos más destacados fue “Días de trueno” que protagonizó junto a Tom Cruise.
Empezó a tener el privilegio de aparecer en diversas producciones con actores y actrices de primera (Michael Keaton, Thandie Newton y Alec Baldwin entre otros), lo cual le permitió ganar mucha popularidad en Hollywood.
Triunfó a lo grande
En 1991 fue nominada por primera vez al Globo de Oro a la mejor actriz de reparto por su interpretación en “Billy Bathgate”. Aunque no ganó, le valió gran reconocimiento en Hollywood y no tardó mucho en poner sus manos en muchos otros galardones.
Si bien su carrera cinematográfica era sumamente interesante, la vida amorosa de Kidman despertaba el mismo interés. Hay suficiente material en ella como para rodar un largometraje, ha llegado el momento de que profundicemos un poco más en ella.
¿Qué hay del amor?
La carrera de Kidman la ha llevado muy lejos y le ha permitido conocer a mucha gente y tener diversas conexiones románticas. En 1986 salió con los actores australianos Tom Burlinson y Marcus Graham (no de manera simultánea, obviamente).
Más tarde tendría que lidiar con la prensa sensacionalista y los rumores sobre sus supuestas relaciones con otras celebridades, por desgracia, es parte del precio de la fama. Sin embargo, su primer gran amor llegó en 1990.
Algo pasa con Cruise
En 1989, Kidman consiguió el papel de la neurocirujana Claire Lewicki en la película "Días de Trueno" (estrenada en 1990). Su coprotagonista en la película era Tom Cruise y la mayoría de ustedes seguro que saben cómo sigue la historia.
En la película, el personaje de Kidman se enamora del de Cruise (¡un corredor de NASCAR! ¿Cómo no iba a enamorarse?) Y, naturalmente, la vida imitó al arte, los actores empezaron a salir juntos y en la Navidad de 1990 se casaron. Ah, y la película fue la más taquillera de ese año, pero eso no nos interesa tanto.
Madre primeriza
Cuando las cosas van tan bien en una pareja, lo natural es que quieran convertirse en una familia completa. Desafortunadamente, no fue tan sencillo. Poco después de casarse, Kidman tuvo un embarazo ectópico, que era demasiado peligroso para continuar. Más tarde tuvo un desafortunado aborto.
Tras tener dificultades para concebir un hijo de manera natural, la pareja recurrió a la adopción. Acogieron a su hija, Isabella Jane Cruise (que nació en 1992), a la que se unió su hermano menor, Connor Antony (que nació en 1995). La joven familia era todo lo feliz que se podía ser.
Viviendo y trabajando juntos
Dos estrellas de Hollywood como Cruise y Kidman están condenados a que la prensa conozca e informe de cada uno de sus movimientos. Hubo una temporada en la que la gente no se cansaba de verlos, incluso volvieron a coprotagonizar una película, en este caso se trataba de la producción de Stanley Kubrick “Eyes Wide Shut”.
Durante los dos años que duró el rodaje de la película, los actores se trasladaron a Inglaterra con sus hijos y prácticamente vivieron en una caravana en el lugar de la filmación. Kidman tiene un recuerdo feliz de esa época, en la que Kubrick a menudo les visitaba y cenaban espaguetis todos juntos.
Trabajando con Kubrick
Stanley Kubrick, uno de los directores más aclamados de nuestra época, tiene un método de trabajo muy característico. Algunos incluso calificarían este proceso como extenuante, ya que impulsa gran parte de su creación a partir de cuestiones psicológicas y profundas, a menudo interroga a sus actores como parte del proceso creativo.
Eso es precisamente lo que ocurrió cuando Cruise y Kidman trabajaron en "Eyes Wide Shut". La película, que explora las fantasías íntimas de un matrimonio, supuso que Kubrick se adentrara en el mismo tema de la vida privada de sus actores. Aun así, Kidman dice que trabajar con él fue como tener el mejor profesor en la escuela de cine.
¿Fue culpa de la película?
Hay quien dice que trabajar con Kubrick en esta película, tan compleja desde el punto de vista emocional e íntimo, fue lo que rompió la pareja.
Sin embargo, Nicole afirma que ella y Tom estaban muy enamorados en ese momento, incluso tenían una forma muy especial de desahogarse al final de un largo día de rodaje: las carreras de karts. Los dos alquilaban un local (a veces hasta las 3 de la mañana) y se dedicaban a correr para eliminar el estrés.
¿Fue culpa de la religión?
La fe de Tom Cruise no es ninguna novedad y como Nicole no comparte esta fe, era cuestión de tiempo que alguien relacionase la separación de la pareja con diferencias religiosas. Sin embargo, Nicole nunca ha dicho nada por el estilo.
Tanto Bella como Connor profesan la misma fe que su padre; y aunque Nicole sigue siendo católica, eso no le importa. Como ella dice, ellos han tomado sus decisiones y lo que ella debe hacer es seguir queriéndolos del mismo modo.
Problemas en el paraíso
Cruise y Kidman tuvieron dos años de reinado como pareja poderosa de Hollywood, adornando casi todas las alfombras rojas con su presencia. No obstante, en algún momento las cosas empezaron a torcerse. A principios de 2001, los dos anunciaron que iban a seguir por caminos separados.
En agosto de 2001, se divorciaron oficialmente alegando diferencias irreconciliables, dejando a Hollywood a la caza de una nueva pareja a la que adorar.
Sin rencores
Aunque ya no estaban juntos, parece que Kidman y Cruise no se guardaban ningún tipo de rencor. No según ella, al menos.
De hecho, en una entrevista que concedió a “Ladies’ Home Journal” en 2016 dijo que siempre le tendrá cariño: “Para mí, solo era Tom, pero para los demás, es alguien muy importante [… ] conmigo era encantador y realmente le quería. Todavía le quiero”.
Soltera y feliz
Tras su divorcio con Cruise, Kidman se centró en su trabajo. Volvió a ser aclamada por su talento y pudo volver a dedicarse a cultivar su carrera a tiempo completo.
Algunos de sus mejores trabajos los realizó en los años posteriores a su divorcio, incluyendo sus interpretaciones en “Moulin Rouge”, “Las horas” y “Los otros”. Este nuevo rumbo pudo ser lo que le hizo ganar el Premio de la Academia a la Mejor Actriz, se lo concedieron en 2003 por su interpretación de Virginia Woolf en “Las horas”.
Lista para la diversión
En cuanto Kidman volvió a estar soltera la prensa rosa no tardó en lanzar rumores sobre posibles romances con cualquier famoso que se la viera. Uno de esos rumores decía que había tenido un romance con su coprotagonista de “Cold Mountain”, Jude Law; y de paso dijeron que eso fue lo que termino de romper su matrimonio.
Kidman no iba a dejar pasar esas acusaciones infundadas. Ella y Law desmintieron la historia y Kidman incluso les sacó una buena suma de dinero a los periódicos sensacionalistas británicos que publicaron el artículo.
Jugando en el campo
Cuando Kidman estuvo preparada para volver a salir con alguien, lo hizo con estilo. Ha mantenido relaciones con varias superestrellas de Hollywood, como el rapero Q-Tip y el músico Lenny Kravitz.
Salió con este último entre 2003 y 2004. Tras su ruptura, tuvo una breve relación con el cantante británico Robbie Williams. Aunque en su catálogo de citas se encontraban algunos los mejores hombres del mundo del espectáculo, ninguno de ellos fue su verdadero amor. Hablando de eso, creemos que es el momento adecuado de conocer un poco mejor a Keith Urban.
¡Bienvenido al mundo, Keith!
El 26 de octubre de 1967 fue un gran día para Marianne y Bob (Robert) Urban. Fue el día en que tuvieron a su hijo menor, Keith, que aún no lo sabían, pero se convertiría en un músico mundialmente famoso.
Antes de que su carrera despegase, el neozelandés Keith no tenía mucho. Vivía con sus padres y su hermano en una granja y todos dormían en una casa tipo cobertizo sin dormitorios individuales.
Nada de cucharas de plata
Antes de poder permitirse mudarse a Australia y tener una situación más favorable, su granja se quemó. Afortunadamente, su comunidad les ayudó generosamente a superarlo. Esta experiencia es la que ayudó a Keith a aprender cuál es el valor de las cosas.
Cuando era un niño, a Keith le encantaba tocar, su padre le buscó un profesor de guitarra y el pequeño músico empezó a inscribirse en concursos locales enseguida. También se apuntó a una compañía de teatro local donde pudo perfeccionar su presencia escénica, que resultaría fundamental en su futura carrera.
No era un buen estudiante
Desde joven Urban tocaba la guitarra y participó en concursos de música, también estaba profundamente influenciado por leyendas del rock como Mark Knopfler y Lindsey Buckingham. Por eso resulta sorprendente que suspendiera la asignatura de música en el colegio.
El colegio y los estudios nunca fueron una prioridad para Urban, que acabó abandonando el instituto a los 15 años. No malinterpretes nuestras palabras, apoyamos plenamente la educación, lo que ocurre es que a Urban y a su talento esta decisión les vino de perlas.
Una cara nueva
Un año después de abandonar los estudios, Urban debutó en el programa de talentos australiano “New Faces”. No tardó en convertirse en un rostro conocido en la industria de la música country australiana.
Empezó a aparecer con frecuencia en programas de televisión como “Reg Lindsay Country Homestead” y “Mike McClellan’s Music Program”. No tardó en empezar a actuar con grupos musicales e incluso grabó una colaboración con su compatriota Jenny Wilson, que les valió un Golden Guitar.
Su primer álbum
Aunque los neozelandeses y los australianos ya conocían a Urban, éste no empezó a adquirir fama internacional hasta 1999. Fue el año en que publicó su primer álbum, llamado precisamente "Keith Urban".
El álbum causó sensación en Estados Unidos y le convirtió en el primer neozelandés en tener canciones en el Top 10 de las listas de country estadounidenses ("But for the Grace of God", "Where the Blacktop Ends"). Dos años más tarde fue coronado como el Mejor Cantante Revelación country Masculino de 2001 por la Academia de Música Country. El amor, sin embargo, aún no entraba en escena.
Pidiendo ayuda
Más discos y canciones de Urban alcanzaron el número uno en las listas. En 2005 ganó su primer Grammy a la mejor actuación masculina country y contaba con el amor y la admiración de muchos seguidores. Sin embargo, durante todo ese tiempo estaba guardando un oscuro secreto.
Antes del lanzamiento de su primer álbum, Urban había luchado contra el consumo excesivo de sustancias. Por aquel entonces vivía en Nashville y un momento de bajón personal le hizo comprender que necesitaba ayuda profesional. Tras ingresar en el centro adecuado, estaba listo para cerrar este capítulo de su vida y centrarse en la música.
La historia según Nicole
En todas las historias hay dos versiones, lo mismo ocurre con la historia de cómo se conocieron Nicole y Keith. Fue a principios del 2005 en “G’day LA”, un evento en honor a los artistas australianos.
En una entrevista en 2017 con Ellen DeGeneres, admitió que le empezó a gustar de inmediato y que pensaba que él no estaba interesado en ella porque tardó mucho (¡cuatro meses!) en llamarla después del evento. Cuando conozcas su versión de la historia verás que es por algo adorable.
La historia según Keith
Urban recuerda haberla visto en el evento, pero no fue la falta de interés lo que le impidió llamar. Según él, simplemente le faltaba confianza. ¿Te lo puedes creer? ¿Una superestrella que no tiene la confianza suficiente en sí mismo como para intentar ligar con alguien que le resulta atractiva?
Tal y como cuenta, tenía su número en el bolsillo desde hacía tiempo y pensar en llamar le ponía muy nervioso porque "si llamo a este número, ella va a contestar y ¡no sé qué le voy a decir!".
La primera llamada
Menos mal que Keith reunió el coraje suficiente para llamar, la primera vez que hablaron por teléfono le hizo darse cuenta de que no había nada que temer.
Una vez que marcó todos los números y ella, de hecho, respondió, hablar fue increíblemente fácil. En una entrevista de 2018 en la televisión australiana, dijo que le preocupaba que ella no estuviera interesada, pero la llamada le tranquilizó. ¡Qué adorable!
Todo parecía ir bien
A Urban le llevó un par de meses llamar a Kidman y a Kidman le llevó más o menos el mismo tiempo darse cuenta de que él era el hombre indicado para ella.
Llevaban juntos unos seis meses antes de que llegara su cumpleaños. Fue entonces cuando él la llevó a un viaje sorpresa a Woodstock, Nueva York y fue ahí cuando se dio cuenta o como ella dice: "En ese momento empecé a creer firmemente que era el amor de mi vida". Obviamente, Urban sentía lo mismo, y los planes de boda no tardaron en iniciarse.
¿Era demasiado pronto?
Comprometerse llevando tan poco tiempo juntos es algo anormal en los tiempos que corren, pero ellos no se arrepienten. Según Nicole, se conocían igual de bien que una pareja casada (a diferencia de otras parejas modernas).
Resulta que fue una decisión acertada, ya que ahora tienen una familia completa con casas en Nashville, Los Ángeles, Nueva York y dos más en Australia.
La boda en Australia
El 25 de junio de 2006, la alta burguesía australiana se reunió desde muy lejos para asistir a la boda de la pareja. La ceremonia se celebró en Manly, Australia (no muy lejos de Sydney) y a ella asistieron los nombres más importantes del país.
La lista de invitados, repleta de estrellas, incluía a Russell Crowe, su mejor amiga Naomi Watts y Baz Luhrmann. El evento estuvo amenizado por las actuaciones del propio Urban, el líder de Crowded House, Neil Finn, y Hugh Jackman.
En lo bueno y en lo malo
Aunque estaban muy enamorados, los recién casados se enfrentaron a un difícil reto al principio de su matrimonio. La vieja batalla de Urban con el consumo de sustancias estaba de vuelta, amenazando con arruinar todas las cosas buenas que tenía en su vida.
Afortunadamente, esta vez no tuvo que pasar por ello solo. Con la ayuda de Kidman, volvió a ingresar en un centro de tratamiento y salió como un hombre nuevo tres meses después. En una entrevista de 2016 que concedió a la revista "Rolling Stone", declaró que es un milagro que su matrimonio sobreviviera y que solo fue posible con Nicole a su lado.
Apoyando a su hombre
Kidman, por su parte, no parece atribuirse el mérito que le corresponde en la victoria de su marido contra sus antiguos hábitos destructivos. En 2007, habló de ello con "Vanity Fair" y dijo que las circunstancias también jugaron un papel en la historia.
En su opinión, los dos se habían conocido en el momento perfecto. Ambos se sentían solos, pero lo suficientemente abiertos como para ser vulnerables el uno con el otro. "Éramos una mezcla de miedo y valentía", dice Nicole.
Ampliando la familia
Kidman ya era madre de los dos hijos que había adoptado con su ex marido, Tom Cruise, pero Urban no tenía hijos. Eso cambió en julio de 2008, cuando ambos tuvieron su primer hijo juntos.
Llamaron a su primera hija Sunday Rose Kidman Urban. Es un nombre bastante largo para un bebé, pero cuando tus padres son una pareja tan poderosa, necesitas un nombre que esté a la altura.
¡Vas a tener una hermana!
Después de no haber podido concebir un hijo con Cruise, es fácil imaginar la alegría que debió sentir Kidman al tener a Sunday Rose. En 2011 la pareja dio la bienvenida al mundo a su segunda hija, Faith Margaret, a la que tuvieron mediante gestación subrogada. Hay que ver la de opciones reproductivas que existen en la actualidad.
De lo único que se arrepiente Nicole, según dijo en una entrevista con la revista “Vogue”, es de no haber conocido antes a Keith para poder haber tenido más hijos con él.
Bebés del mundo del espectáculo
Cuando tus padres tienen carreras con tanto éxito, es normal que en algún momento te conviertas en el centro de atención, en el caso de Sunday y Faith, ocurrió muy pronto. Cuando protagonizaba la exitosa serie de HBO “Big Little Lies”, Kidman consiguió que sus hijas participaran en la serie como extras.
El cameo se mantuvo en secreto hasta que la actriz lo contó accidentalmente en una entrevista con Ellen DeGeneres en 2018. Las dos niñas también participaron como extras en la miniserie “The Undoing” (protagonizada también por Kidman) y doblaron personajes pequeños en “Angry Birds 2: la película”.
Consiguen que funcione
Criar a los hijos le supone un reto a todo el mundo, incluso a padres famosos como Nicole y Keith. Parece que la pareja disfruta de la paternidad y mantienen una estrecha relación con sus hijos. De hecho, Nicole afirma que uno de ellos siempre está con los niños, lo que tiene que resultar complicado, dadas las apretadas agendas que tienen los dos.
En cierto momento, los horarios coincidieron, Nicole se puso en contacto con su hermana, Antonia, para pedirle ayuda. Antonia estaba encantada de poder echarles una mano y se trasladó a la casa de los Kidman-Urban con sus propios hijos durante un tiempo. Kidman está encantada de tener una familia tan cariñosa.
Pequeño gran marido
La serie de televisión "Big Little Lies" trata temas turbios, que podrían pasar factura a cualquiera, por no hablar de los actores que interpretan a los sufridos personajes. Durante el rodaje de la segunda temporada de la serie, no fue fácil lidiar con esta situación, pero la actriz salió adelante en parte gracias a su marido.
En una entrevista con "Entertainment Tonight", dijo que se considera afortunada de tener un hombre tan comprensivo al que poder llamar marido.
Amar y perder
En 2014 la pareja tuvo que enfrentarse a un nuevo desafío: el fallecimiento del padre de Nicole. Nicole y su padre estaban muy unidos, así que su muerte fue un duro golpe para ella.
Aproximadamente un mes después del fallecimiento de su padre, Kidman fue como invitada al programa de Ellen DeGeneres (una vez más) y habló de cómo Keith la estaba ayudando a superarlo. Dijo que su apoyo la conmovía muchísimo y que “haría cualquier cosa por ese hombre”. ¡Eso sí que es amor verdadero!
All You Need Is Love
Parece que el amor incondicional es un filón en la vida de Kidman. Ha declarado que sigue amando a su ex marido (aunque de una manera diferente, obviamente). Evidentemente, siente todo el amor que una madre podría ofrecer a sus hijos y está locamente enamorada de su marido cantante de country.
El amor forma parte de la filosofía de vida de Nicole, especialmente cuando se trata de la educación de los hijos. Ella cree que para crecer bien, un niño debe saber que sus padres siempre serán comprensivos y cariñosos. Sinceramente, no podríamos estar más de acuerdo.
Su mayor fan
Aunque Urban hace todo lo posible por apoyar a su encantadora esposa, también está muy impresionado con ella. El músico dice que ella tiene un maravilloso gusto musical porque se deja llevar por su instinto sin fijarse en géneros, etiquetas o terminologías oficiales.
Esta perspectiva le ha animado a explorar más con su arte y su música. Le ha animado a dejarse llevar por su curiosidad y a ser más intrépido, lo que parece el sueño de todo artista.
La mejor de las fans
Nicole no se conforma con enriquecer el gusto musical de su marido ni con animarle a seguir sus instintos artísticos. También promueve su música en las redes sociales, es bastante común que se suban publicaciones en Instagram invitando a los fans a comprar entradas o a escuchar su última canción.
Además, cuando dio un concierto en directo por Internet, igual que muchos otros artistas en 2020, ella fue todo menos tímida ante las cámaras, de hecho, ¡se sentó a su lado durante todo el concierto!
Es cosa de familia
Sunday y Faith también son grandes fans de la música de su padre. De hecho, formaron equipo con su madre para celebrar el lanzamiento del último álbum de Urban y le dieron una sorpresa.
El último álbum de Keith, "The Speed of Now Part One", salió en septiembre de 2020. Mientras él estaba de gira promocionando el disco y el resto de su familia permanecía en Australia, Nicole y las chicas le enviaron un paquete sorpresa que incluía flores, globos, galletas e incluso una tarta con la portada del álbum impresa.
Sabe cómo cortejar a una dama
Dado que las carreras de ambos son tan exigentes, es lógico que tengan que pasar alguna que otra noche separados. Pero Keith ha encontrado una forma clásica de hacer que esas noches de separación sean un poco más entrañables: las cartas de amor.
Según Kidman, siempre que Urban está de gira, le deja cartas de amor, una por cada noche que tienen que pasar separados. Al parecer, lo lleva haciendo desde que empezaron a salir. ¡Qué romántico!
¿Cuál es su secreto?
Parece que ambos han encontrado la clave para un matrimonio largo, feliz y próspero. ¿Qué consejos podrían compartir con alguien interesado en un destino similar?
Según Kidman, el secreto está en dedicarse tiempo el uno al otro. Tanto Nicole como Keith trabajan mucho, pero se empeñan en dejar sus trabajos de lado cuando están en casa juntos. Básicamente, su consejo es que se aseguren de no dejar que el trabajo repercuta en el matrimonio.
De Nashville a Australia
Los Kidman-Urban pasaron la primera mitad de 2020 en su casa de Nashville, la otra mitad la pasaron en su casa de Nueva Gales del Sur (Australia), más cerca de sus parientes.
¿Y qué hay de la escuela? Bueno, al igual que muchos otros niños y niñas en edad escolar en 2020, empezaron a estudiar desde casa. Según Urban, Nicole es mucho mejor profesora que él, atribuye sus limitadas habilidades de enseñanza a que abandonó el instituto a los 15 años.
De su casa a la tuya
Incluso cuando no puede salir de casa con tanta frecuencia, gracias a las tecnologías y a las redes sociales, Urban puede mantener a sus fans (y a su familia) entretenidos con raros resquicios de sus composiciones musicales.
Mostró imágenes de su estudio de música en Nashville, publicó en Instagram un vídeo tocando el piano en el salón de su casa y dio conciertos por Internet. Los fans no se cansan de ver la cálida personalidad de este hombre, su hogar y su familia.
Tiempo en familia
Aunque no pudieron pasar mucho tiempo al aire libre en el 2020, la familia ha disfrutado de la cercanía y la presencia de todos sus miembros. Especialmente la hermana menor de Nicole, Antonia, y su madre, Janelle.
Nicole afirma que le gusta pasar las mañanas en la cocina y que sus hijos hagan ruido a su alrededor. Sinceramente, consigue que ese estilo de vida hogareño suene increíblemente atractivo.
Hogar dulce hogar
Bueno, cualquier cosa puede parecer bonita si se tiene en cuenta el tamaño y las instalaciones de la casa de Keith y Nicole en Nueva Gales del Sur. La propiedad se extiende por un terreno de 45 hectáreas, territorio en el que cuentan con: una piscina, una pista de tenis y la casa familiar de seis dormitorios, entre otras cosas.
Además de los miembros humanos de la familia, el lugar es también hogar de un montón de animales, como gallinas, ganado y seis alpacas.
Han pasado de todo juntos
Después de pasar por problemas financieros, emigrar de un país a otro, experimentar amores y pérdidas, y permanecer juntos tremendamente enamorados, no cabe duda de que la relación de esta pareja es digna de admiración.
Son la viva evidencia de que, mientras demuestres amor y apoyo incondicional, nada puede interponerse entre tú y tu pareja. Ni siquiera Hollywood.